Las cámaras térmicas, actualmente están presentes en los sistemas de vigilancia. Sus usos son muy variados gracias a su capacidad de detectar cuerpos más allá de la luz visible, convirtiéndose en un dispositivo de referencia, sobretodo para la seguridad perimetral.
Es importante conocer cómo funciona una cámara termográfica para entender su verdadera importancia en una instalación de seguridad.
¿Qué es una cámara termográfica?
También conocida como cámara térmica, se trata de un dispositivo que mide la temperatura de los objetos y forma imágenes visibles al ojo humano a partir de detectar emisiones de infrarrojos debido a la emisión de radiación de estos.
Hay que hacer especial mención a que, la radiación medida por la cámara no sólo depende de la temperatura del objeto, sino que además es una función de la emisividad de la cámara termográfica, es decir, la radiación también se genera en los alrededores del objeto y se refleja en el mismo.
En resumen, una cámara termográfica nos permite ver en una pantalla la radiación calorífica que emite un objeto, animal o persona aunque a simple vista no se pueda.
Funcionamiento de la cámara termográfica
Para saber cómo usar una cámara termográfica hay que tener en cuenta que, todos los objetos emiten una radiación infrarroja. Cuanto mayor sea la temperatura de ese objeto mayor será su radiación.
La imagen térmica del objeto viene dada por el registro de la temperatura de cada pixel de la imagen y, asignando a cada uno de ellos, un tono de color. Normalmente, las cámaras termográficas representan las imágenes más frías con tonos como el azul, morado o verde y las más cálidas con tonos rojos, naranjas o amarillos.
El funcionamiento de una cámara termográfica consiste en detectar la temperatura del objeto, animal o persona capturando diferentes niveles de luz infrarroja, invisible a la vista humana, y construir imágenes térmicas en base a las radiaciones captadas.
Las cámaras termográficas funcionan gracias a sensores, estos pueden ser pasivos cuando sólo se limitan a detectar el calor emitido por un objeto o activos que son aquellos capaces de calentar la superficie del objeto para poder recoger mejor la información sobre la temperatura del mismo.
Aplicaciones de las cámaras térmicas
La tecnología avanza a diario y por ello, cada vez más se pueden usar este tipo de cámaras en ámbitos más variados y para diferentes aplicaciones.
Ciñéndonos a materia de seguridad, que es el tema que nos concierne, las cámaras termográficas se usan en el sector industrial, construcción, sanidad, militar, construcción de vehículos, etc.
A nivel industrial, el funcionamiento de una cámara termográfica se usa para detectar fricciones en motores, calentamientos de componentes eléctricos, fugas, sobrecargas, entre otros.
En construcción se usan las cámaras termográficas para comprobar la eficiencia energética de un edificio, la distribución de la temperatura en los sistemas de calefacción, etc.
En cuanto a sistemas de seguridad, nos ayuda a detectar focos de incendios, fugas de gas o agua en los hogares, establecer perímetros de seguridad para detectar presencias sospechosas en la oscuridad, etc.
En negocios además de servir como dispositivo de seguridad, se usan las cámaras termográficas para controlar la temperatura de las personas debido a la situación de emergencia sanitaria que hemos atravesado, y así poder detectar a tiempo si una persona podría tener síntomas del virus COVID-19 debido a su alta temperatura y alertar para tomar medidas sanitarias.
Como podemos ver, el funcionamiento de las cámaras termográficas es amplio y variado en todos los sectores, aportando grandes ventajas en seguridad para los clientes y usuarios del mismo.
Desde Grupo Control ofrecemos servicios en seguridad con cámara termográfica para su uso en en hogar, negocio, industria, etc. Con las mejores innovaciones tecnológicas del mercado para garantizar su efectividad.